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2 de Junio
Mucho se ha hablado sobre el Síndrome de Asía pero entre Nosotras sabemos que para algunas es un tema algo difícil de entender y que, hasta el día de hoy, nos invaden algunas dudas sobre cuáles son sus síntomas, alertas y si, en realidad, es una enfermedad que se relaciona únicamente con los implantes mamarios. Por este motivo, hemos abierto un espacio con el Dr. Jairo Patarroyo (@doctorpatarroyo), cirujano plástico, estético y reconstructivo, quien se unió a este artículo para contarnos acerca de la explantación y esos mitos que también han comenzado a circular alrededor del tema.
Antes de entrar en materia, despejemos el panorama y aprendamos del Síndrome de Asia, qué es, y por qué todas estamos hablando de esto. Pues se trata de una enfermedad autoinmune, o autoinflamatoria, que se da por la presencia de una sustancia extraña en nuestro organismo. En palabras más simples, es una reacción interna que puede variar desde un dolor de cabeza hasta una afección en las articulaciones porque hay un “error” en las células de defensa. Según el dr. Patarroyo esto sucede como una respuesta del cuerpo a diferentes sustancias conocidas como “adyuvantes” entre las que podemos encontrar tintas de tatuajes, vacunas, biopolímeros y también, prótesis de silicona.
No hay nadie que nos conozca más de lo que nos conocemos Nosotras mismas, y es ahí cuando nos damos cuenta de que algo no anda bien en nuestro cuerpo. Es normal que al pensar en reacciones atípicas teniendo implantes mamarios, lo primero que se nos venga a la cabeza sea el Síndrome de Asia, así que antes de preocuparnos o tomar cualquier medida desesperada, lo mejor será consultar con un especialista.
Te contamos más sobre esos síntomas a los cuales debes permanecer alerta:
Permanece atenta a tus zonas articulares ya que puedes experimentar de manera frecuente, dolor en algunas de ellas.
Los dolores musculares, o mialgias, también corresponden a un síntoma común del Síndrome de Asia.
Si tienes problemas para conciliar el sueño o te despiertas varias veces durante la noche.
Fatiga crónica o esa sensación de estar cansada la mayor parte del tiempo.
Y tener resequedad en los ojos y en la boca también podría ser una alerta de esta enfermedad.
Actualmente, el Síndrome de Asia sigue siendo todo un enigma médico ya que, en algunos casos, no suele haber un diagnóstico certero que nos revele que los síntomas se le atribuyen a una enfermedad específica. Si bien, no todos los cuerpos reaccionan de la misma forma, debes estar pendiente de cualquier señal física inusual, tanto como si tuvieras implantes o biopolímeros, incluso, como si nunca hubieses pasado por un quirófano.
Y es aquí cuando el dr. Patarroyo nuevamente nos comenta que hay diversos factores que pueden desatar esta enfermedad en Nosotras.
"En el día a día todos nos vemos tan enfrentados a diferentes sustancias externas que, alguna de ellas, potencialmente podría producir un Síndrome de Asia; pero como también se tiene un registro de implantes, cirujano, fecha, hora exacta y demás, solemos entonces sesgarnos y creemos que las prótesis son las únicas responsables de lo que estamos sintiendo, cuando incluso hay descritos productos capilares que pueden generar estas reacciones".
Siempre, y sin excepción, cuando tengamos cierta sospecha de que esos síntomas están relacionados con el Síndrome de Asia, debemos acudir a nuestro cirujano plástico y al reumatólogo, quien se encargará de enviar los anticuerpos y hacernos diferentes pruebas o estudios de sangre para dar con el diagnóstico más cercano posible.
Si dado el diagnóstico, no se encuentra ninguna sustancia reactiva más allá de las prótesis mamarias, la alternativa más conveniente en tu caso es realizar el retiro del implante y del tejido cicatrizal que se crea alrededor de él (como en forma de cápsula). Ten en cuenta que la explantación no siempre garantiza que los síntomas vayan a desaparecer; pero la única forma de saber si en realidad el pronóstico tiene todo que ver con los implantes, es esperar después de la cirugía.
Así como hay mujeres que tienen implantes de senos y sienten que ha sido la mejor decisión de sus vidas, hay otras a quienes este “boom” o llamémoslo saturación de información, las han llevado a pensar que deben explantarse para no poner en riesgo su salud. Lo cierto es que no tienes por qué preocuparte si aún no hay rastros de síntomas.
Según el dr. Patarroyo, hay estudios recientes que demuestran que los geles de siliconas que se usan en la actualidad, tienen una mayor densidad, lo cual evita que el líquido se “salga” y esto, a su vez, disminuye la posibilidad de contraer estas enfermedades. Así que, ¡actúa con calma! Las prótesis pueden NO ser el problema.
De seguro, al igual que Nosotras, poco sabías sobre cómo funcionan las prótesis mamarias y qué categorías podemos encontrar en ellas. Así que, nos tomamos la tarea de consultarlo con el dr. Jairo Patarroyo, quien nos aclaró que existen dos tipos de implantes:
Los implantes de solución salina, usados principalmente en cirugías reconstructivas posterior al cáncer de mama.
Los implantes de silicona, que se dividen en anatómicos y redondos, y lisos o texturizados (según su cobertura), estos son utilizados en cirugías estéticas como implantes, mastopexias y o de reconstrucción. Las prótesis las podemos encontrar en diferentes tamaños y medidas, además nos ayudan a darle más volumen y forma a nuestros senos.
A veces, como todo en la vida, tenemos que mirar ambos lados de la balanza y entender que en cualquiera de ellos hay riesgos que podemos correr. En el caso de las prótesis mamarias, pasa lo mismo que con cualquier otra intervención quirúrgica a la cual nos vayamos a someter y por eso es tan importante tener un diagnóstico e historial previo.
Sin embargo, el dr. Patarroyo hace especial énfasis en que estas siliconas cada vez han venido mejorando su calidad y sus componentes y que en la actualidad los implantes de 5ta y 6ta generación cuentan con un gel altamente cohesivo, que como te lo explicamos en líneas atrás, evitan que el contenido se derrame. Igualmente, también se ha demostrado que las prótesis NO aumentan el riesgo de padecer cáncer de mama; incluso, se ha visto que las pacientes con implantes, en estos casos, podrían llegar a tener una detección más temprana debido a que tienen controles médicos con mayor frecuencia.
Aunque Nosotras creamos que se trata de un tema nuevo, lo cierto es que el retiro de implantes siempre ha existido. Estos, muchas veces necesitan ser explantados debido a un rechazo por parte del organismo, que se conoce como “contractura capsular”, también cuando se evidencia una ruptura de la prótesis o, simplemente porque la paciente ha decidido quitárselos y hasta este punto ¡está bien!
Sin embargo, también es nuestro deber hablar sobre la desinformación que podemos encontrar hoy en las redes sociales, o en la internet acerca del Síndrome de Asia qué es, y cuáles son sus tratamientos: pues esto, de cierta forma, ha hecho que más mujeres se sientan inseguras con sus implantes y decidan retirarlos.
El dr. Jairo Patarroyo hace un llamado a que comprendamos que cada paciente y cada caso es único, y debe ser valorado por su cirujano plástico de manera personalizada para definir si se requiere o no el retiro del implante.
Cualquiera que sea nuestro caso, somos completamente libres de elegir si queremos o no extraer nuestros implantes, siempre y cuando, esa elección nos dé tranquilidad, confianza y la satisfacción de haberlo hecho para cuidar nuestra salud más allá de las cicatrices que el procedimiento pueda implicar. Es importantísimo llevar a cabo un diálogo con el cirujano plástico para darle a conocer nuestros motivos y, de ser necesario, contar con el apoyo de un psicólogo para aprender a abrazar esa nueva versión que nos acompañará a Nosotras.
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