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26 de Noviembre
Seguramente tienes recuerdos guardados en tu inconsciente del amor de mamá y la risa de papá, ya que la primera relación de un vínculo fuerte que experimentamos en nuestra vida es con la familia.
Bien sabemos que, a veces, la relación que tenemos con nuestra familia no es sencilla, pero también reconocemos que así como las relaciones con amigos, pareja o con nosotros mismos, el amor de familia nos conecta con quienes somos, nuestras raíces y es la base de nuestro carácter y comportamiento.
Para todas nosotras el amor de familia puede representar ¡sin duda! significados totalmente diferentes, pero bien sea que tengas relación, o no, con ellos, es una conexión emocional que desarrollamos desde el momento que nacemos. Este amor lo experimentamos de maneras muy distintas, y se pueden relacionar con los 5 lenguajes del amor: palabras de afirmación, tiempo de calidad, regalos, contacto físico y actos de servicio. ¿Te identificas con alguno?
Si solo pudiéramos experimentar una forma de amor, sería muy triste, pues bien sabemos que amar distinto despierta diferentes emociones y sensaciones en nosotras.
Esta es la conexión que tenemos directamente con nuestros padres, se basa en ese vínculo que se puede ver de muchas maneras y día tras día vamos fortaleciendo.
Para ninguna de nosotras es un secreto que, muchas veces, nuestro amor propio depende de los ejemplos que veamos en casa, o que simplemente proyectemos de las personas que más cerca tengamos. Lo importante y más valioso aquí, es que a medida que vamos creciendo podamos descubrir y crear nuestras propias herramientas para sentirnos mejor.
Este es todo un mundo aparte, ¿no crees? El amor de padres se vive de formas muy distintas con cada uno. Con mamá solemos tener más confianza para hablar de nuestras cosas personales, mientras que con papá siempre aprendemos algo nuevo. Y, en cuanto a los hermanos, la relación cambia mucho según la edad, pero lo curioso es que, cuanto más crecemos, más fuerte se vuelve ese vínculo.
¡Definitivamente para todas el amor de familia despierta diferentes sentimientos!
Si bien todas somos muy diferentes, cada una va creando su propia dinámica en casa, muchas veces sin darnos cuenta. Esa forma de interactuar y vivir en nuestro hogar surge de manera natural. Los elementos que veremos a continuación son claves para mejorar nuestro entorno familiar y construir relaciones más sanas y equilibradas.
Todas en muchos momentos de nuestra vida necesitamos sentirnos escuchadas y valiosas, por eso es fundamental tener un entorno familiar en donde nos sintamos protegidas y podamos expresar nuestros pensamientos y sentimientos sin sentirnos juzgadas.
Respetarnos a nosotras mismas tal y como somos, sin intentar cambiarnos, sino siempre buscando crecer en lo personal, emocional y profesional.
Imagina por un momento una manada de elefantes, que se cuidan, se ayudan, se respaldan y quieren siempre el bienestar los unos de los otros. Pues así es el amor de familia: siempre están ahí para protegernos, asegurándose de que estemos bien y podamos disfrutar de cada etapa de nuestra vida.
Seguro que has escuchado en casa eso de “El estudio es muy importante”, y es verdad. Pero lo bonito es que el aprendizaje llega de muchas maneras: desde los consejos de mamá, las historias que te cuenta papá o incluso los juegos con tu hermano. Todo eso influye directamente en tu desarrollo y te ayuda a crecer.
Como en todas las relaciones, la comunicación es uno de los pilares fundamentales para que todo marche bien. Una comunicación asertiva y abierta con tu familia, te permitirá solucionar conflictos con facilidad y fortalecer los lazos.
Sentirnos respaldadas y amadas es clave para crecer como mujeres. Nos da seguridad, mejora la forma en que nos vemos a nosotras mismas y nos ofrece las herramientas para construir relaciones abiertas y seguras, tanto con nuestras amigas como con las personas a nuestro alrededor.
Crecer y cambiar es una constante en nuestras vidas, que seguramente nunca acabará, sobre todo si somos adolescentes, y es cierto que, muchas veces tantos cambios nos generan malestar físico y emocional, sentir el amor y la comprensión de nuestra familia, nos ayudará a transitar estos cambios de manera más consciente y segura. En este caso queremos recordarte que está bien pedir consejos y poder desahogarte, esto muy seguramente te ayudará a estrechar lazos y tener relaciones más profundas con quienes amas.
No solo el contacto físico es importante, aunque en esos días en que nos sentimos tristes, ¡un abrazo reconforta como nada! También podemos demostrar cuánto queremos a los demás compartiendo tiempo de calidad. Una idea genial podría ser una noche de pelis y comida. Y, algo clave: escuchar. A veces, estamos tan metidas en el celular o en la compu que olvidamos crear esos espacios de conversación. Recuerda, fuera de la pantalla está tu familia, y sin darnos cuenta, nos aislamos. Un simple “¡estoy aquí para lo que necesites!” puede ser la mejor forma de demostrarles cuánto los amas.
Si después de leer este artículo quieres algunas ideas para variar la monotonía con tu familia te vamos a dar el top 3 de películas que deberían ver juntos sobre el amor de familia:
La vida es bella de Roberto Benigni. Prepara los pañuelos porque seguro se te escaparán algunas lágrimas. Ambientada en plena guerra, muestra cómo un padre crea un mundo de fantasía para proteger a su hijo de la dura realidad, regalándonos una lección conmovedora sobre el amor y el sacrificio.
En busca de la felicidad de Gabriele Muccino. Esta película nos enseña que, aunque el camino sea duro, luchar por nuestros sueños siempre vale la pena. Es un recordatorio inspirador de que la perseverancia y el amor familiar son nuestras mayores fortalezas.
Para cerrar con broche de oro, Coco de Adrián Molina y Lee Unkrich. Una película animada que nos recuerda lo que siempre decimos: la familia es el pilar fundamental de nuestra vida, y el amor y las tradiciones familiares perduran para siempre.
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