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16 de Marzo
Cada enero me sentaba a construir un mapa de sueños con cada una de mis metas desbordadas y un sinfín de revistas recortadas que me anunciaban que la magia del inicio del año y la esperanza, que traen estas fechas, de que todo puede ser posible, habían llegado. Pegaba cada pieza con la confianza plena de que el papel podía manifestar cada una de esas intenciones, pero cuando el año iba pasando todos los recortes simplemente quedaban abrumados, el afán de cada día me hacía olvidar un poco más lo que había plasmado y la frustración de mis planes tomaba más protagonismo.
Era un círculo vicioso que empezaba en enero y terminaba en diciembre con un: “el próximo año sí” hasta que llegó ese año en donde más que plasmar mis sueños decidí ponerles un plan de acción y una fecha que me sirviera como guía de manifestación, comencé aprender todo sobre planeación, hábitos, productividad, rutinas y gestión del tiempo con la certeza de que no existía otra opción que hacer mis sueños realidad y por eso estoy aquí, escribiéndote este artículo, porque los tuyos también merecen ser cumplidos.
Muchísimo gusto, soy Juli Taborda, la creadora de Ser para Hacer y quiero darte aquí todas las herramientas posibles para que este año tus sueños sean un plan de acción que vivas cada día y que pase lo que pase tengas mil oportunidades para hacerlos realidad.
Paso 1: Cerrar ciclos
Somos lo que aprendemos de cada experiencia, el 2020 nos dejó muchísimas, pero muchísimas enseñanzas, entre ellas la de recordar que un plan siempre es una guía y no una camisa de fuerza, que las circunstancias pueden variar y que no se debe renunciar a los sueños, sino crear un nuevo camino para llegar a ellos. A la hora de planear y de soñar este nuevo año utiliza todas estas lecciones a tu favor, ya la vida nos demostró que todo puede ser posible.
¿Cómo hacerlo?
Haz un flashback de todo lo que pasó, de tus planes del 2020, de todo los que se cumplieron y todos los que no, haz una lista con tus enseñanzas y agradece por cada una de ellas, haz una lista de tus logros y con esto me refiero a cada paso que diste día a día para sobrevivir a una pandemia mundial, reconocerlos y reconocerte en ellos te va a dar la oportunidad de comprobar de todo lo que eres capaz.
Somos ciclos y para comenzar este nuevo es necesario cerrar los viejos y sacar lo mejor de ellos.
Conoce más sobre el tema de cerrar ciclos en el artículo: 7 tips para cerrar ciclos y ¡empezar el año renovada!, de Nosotras.
Paso 2: La planeación de tus sueños
Lo más importante aquí es que todo lo que sueñas hoy, la motivación que dan estás fechas y todo aquello que quieras lograr este año, perdure en el tiempo, que tus sueños se conviertan en un plan y ese plan en acciones y esas acciones en hábitos y esos hábitos en rutinas diarias para que cada día puedas construir la vida que sueñas y materializar lo que quieres.
¿Cómo lo vamos hacer?
Lo primero es identificar qué quieres, puedes hacer una lista completa de todos tus sueños, de todo lo que deseas hacer en este nuevo año y luego por cada uno preguntarte:
Cómo voy a lograr esto, aquí es donde se identifican las acciones.
Por qué lo quiero, aquí encontramos la motivación para hacerlas.
Cuándo lo quiero, aquí concretamos las fechas y ubicamos cada meta en el tiempo, pero es importante que tengas en cuenta que la fecha para iniciar el sueño es más importante que en la que debe de cumplirse el mismo.
Así es como un sueño pasa a ser un plan de acción y la diferencia se encuentra en el paso a paso y en la claridad para lograrlo, te dejo aquí el ejemplo para que tú misma lo compruebes y lo apliques a los tuyos:
Mi sueño: Viajar
Mi plan de acción: Quiero viajar a Tulum en diciembre del 2021, el presupuesto estimado del viaje es X cantidad de dinero, me voy a quedar en el hotel Mereva y debo ahorrar X cantidad de dinero cada mes. En X fecha compraré los tiquetes.
¿Notas la diferencia?
Paso 3: Construye rutinas de manifestación
Ya tenemos el flashback y ya tenemos todo un plan de acción, ahora lo que sigue es construir la realidad en la que tus sueños se van a construir a través de las rutinas que nos ayudarán a mantenernos productivas y enfocadas.
Tus planes necesitan tiempo, pero tú, quien eres la que los realiza, también lo necesitas. Cuando estaba en todo este proceso de aprendizaje mis lecciones más importantes vinieron de los espacios que sacaba para mí, para cuestionar mi realidad, para reflexionar sobre mis acciones, para descubrirme, para reconocer las herramientas que hay en mi interior para manifestar en mi mundo exterior, para cultivar los hábitos que quería y para trabajar en mí, a este espacio lo llamé rutina de aceleración y fue el método que creé cuando después de hacer todo mi plan e identificar cada una de las acciones que necesitaba para mis sueños, no sabía en qué momento del día hacerlas, ni cómo prepararme para ellas, así que tomé la decisión de que las primeras horas de la mañana no iban a ser de afán como llevaba años viviéndolas, que iban a ser un espacio dedicado completamente a mis sueños y a mí.
Hoy te regalo este método para que tú también puedas crear tu propia rutina de aceleración, para que tengas ese espacio del día en el que te puedas preguntar qué necesitas y poder dártelo, de prestarte atención, un tiempo para ti, un tiempo para manifestar las acciones para cumplir todos tus sueños.
¿Cuánto tiempo necesitas para esta rutina? No se trata de cantidad, se trata de calidad, no importa que sea una hora o 15 minutos lo importante es que sea 100% enfocado en ti y en tus sueños de esta manera podrás hacer una pausa en el mundo, concentrarte en lo más importante y sobretodo recargar tu energía.
Paso 4: La flexibilidad
Ya conocemos todos los pasos para construir un plan de acción, pero el ingrediente secreto siempre será la flexibilidad del mismo, cuando tus días cambien, las situaciones varíen, los obstáculos aparezcan y las cosas no salgan como esperas, aprende a ser flexible, no a renunciar, esto se refiere a rediseñar, acomodar tus acciones en las circunstancias actuales, en buscar soluciones y sobretodo en poner en marcha tu creatividad para encontrar oportunidades en vez de frustraciones.
Por último, te quiero recordar que todos estos tipstipsudos son maravillosos, pero hay otros aspectos que debemos tener en cuenta en nuestra planeación, que para mí son de los más importantes, así como identificas qué quieres lograr, también pregúntate cómo te quieres sentir y quién quieres ser, las metas son maravillosas, pero lo es aún más que te conviertas en la persona capaz de lograrlas, no sirve de nada lograr algo si no te sientes bien al hacerlo.
Recuerda que en el proceso se encuentran las grandes metas, que los pasos diarios construyen grandes resultados, que la forma más perfecta o la mejor forma de hacer algo es simplemente hacerlo, que a veces las pausas son necesarias, que la productividad es un trabajo de autoconocimiento, que no solo importa la gestión del tiempo sino también la gestión de tu enfoque y tu energía, que trabajar en ti, sacar tiempo para ti y descubrirte es una de las tareas más importantes y por último, recuerda que la magia de la planeación siempre ocurre en la acción, que podemos con todo, pero no con todo a la vez y que ya estás lista para todo lo que sueñas, mereces intentarlo y sobretodo, comprobarlo, creo en ti.
¡Vamos a sacarla del estadio este nuevo año!
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