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8 de Septiembre
Es verdad que cuando pensamos en la sexualidad parece que nos estamos refiriendo únicamente al contacto físico, porque cuando de placer se trata, todo parece ser válido, incluso involucrarse con personas que son completamente incompatibles con nosotras, nuestros pensamientos y las vibraciones de nuestra alma… pero la sexualidad también es una actividad espiritual y de conexión.
Empieza a contemplar tu vida sexual como un acto de trascendencia donde estás presente no solo con tu cuerpo, sino también con tu mente y tu alma.
La sexualidad no solo se representa en un intercambio de fluidos, también permite que las sensaciones y las energías se transmitan de una persona a otra, generando un vínculo tan grande que pueden aflorar sentimientos; por eso es tan importante que elijas de manera acertada con quien convives en tu intimidad, siendo consciente de que no solo estás compartiendo con su cuerpo; también estás conectando con su alma.
¿Te ha sucedido que después de tener encuentros sexuales te sientes incluso más vacía e insatisfecha? Si es así, entonces es momento de prestarle atención a los vacíos emocionales que están surgiendo en tu interior y que quieres ocultar.
Tal vez es momento de que dejen de tomárselo a la ligera para que empiecen a programar sus encuentros de manera romántica, sentida y con mucha conexión:
Enciendan algunas velas: Las luces cálidas son excelentes para generar un ambiente más íntimo.
Aromas que disfruten: Pueden encender un incienso si les gusta, utilizar un difusor de olores o de entrada, encender velas aromáticas, para que se sientan más conectados.
Conversen sobre lo que les gusta y disfrutan: La comunicación es un espacio de conexión muy poderoso. Cuando escuchas al otro y le cuentas también sobre ti, desnudan sus almas, lo que podrá darles una mayor cercanía.
Pon en práctica algunos de estos consejos y verás como la conexión puede subir de nivel, generando mucha más seguridad y confianza.
Deja atrás todo sentimiento que liga la sexualidad con la culpa y empieza a verla como un momento de disfrute, conexión y crecimiento, de esa manera lograrás una mejor relación con los demás y contigo misma en un proceso de exploración y autoconocimiento que te llevarán a disfrutar de tu sexualidad espiritual a otro nivel.
Dale un toque emotivo a cada encuentro para que la liberación física no se quede en lo superficial y que así, tu alma, además de tu cuerpo, alcance el clímax perfecto que te invita a trascender.
Aventúrate a sentir y entender que más allá de las creencias, está el encontrarte a ti misma y conectar con tu pareja en este proceso; notarás grandes cambios y crecimiento en tu relación cuando lo empieces a aplicar y disfrutar.
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