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Hoy les tenemos una súper sorpresa: ¡una nueva invitada! Es una persona que seguramente nuestras amigas de Argentina conocen. Ella es Candela Yatche, es una mujer maravillosa, empoderada y multifacética. Es psicóloga, fundadora de Bellamente, comunicadora, investigadora y activista por la diversidad corporal. En resumen, ¡es una inspiración! Si quieres conocer lo que ella tiene para contarnos, sigue leyendo...

Cuando hablamos de bullying, hablamos del comportamiento de persecución u hostigamiento que tiene un alumno hacia otro, este puede ser de carácter físico o psicológico. Se da de manera reiterada y continuada.

En un estudio que hicieron durante el 2020 desde “Encontrarse en la Diversidad” se halló que el principal motivo de bullying es por el aspecto físico:

¿Cuántas veces escuchamos comentarios como: “eres una jirafa” haciendo referencia a la altura, “Dientes de lata” criticando el uso de brackets , “pelirrojo mala suerte” asociando un color de pelo con la “suerte” de una persona?

Ahora bien: ¿Dónde aprende un niño que tener determinada contextura física, determinado color de piel, ojos, pelo, está “mal” y debe ser socialmente excluido? Puede copiarlo de algún familiar, de algún personaje del contenido audiovisual que mira, de algún otro compañero.

Es por eso que es muy importante que desde las casas, se trabajen estos temas, y se enseñe a no valorar ni desvalorizar a otras personas solo por su físico, ya que nadie se define por su cuerpo.

Un dato alarmante es que el discurso de odio entre niños y adolescentes aumentó un 70% desde que empezaron las clases online durante el 2020 (L1ght; 2020).

El cyberbullying es el acoso a través de chats, redes sociales, mails, que permiten sostener el hostigamiento a toda hora y desde cualquier lugar.

Es conveniente estar atentos al contenido virtual que consumen los niños, y a lo que les genera usar los dispositivos tecnológicos, para ayudarlos en caso de que lo necesiten, o para frenar alguna situación de acoso cibernético.

¿Qué hacer si un niño llama a alguien “gordo” “alto” “bajito” “colorado” como insulto? Por un lado, comentarle que esas palabras no tiene valor negativo o positivo, no es ni bueno ni malo, simplemente es lo que es, un adjetivo. Y por el otro, se debe empezar a generar conciencia desde una temprana edad de que no deberíamos hablar del cuerpo de otro, que todos tenemos espejos para vernos, y que uno no es ni mejor ni peor persona por el cuerpo que tiene.

Fomentemos que pasen a la acción para ayudar a otro si está siendo acosado: enseñarles que si se están burlando de un compañero no se sumen riendo, ni le den like a burlas virtuales y que se acerquen a quien está solo, triste y les pregunten qué les pasa.

A su vez, es importante que los adultos responsables den ejemplo y no reproduzcan estereotipos criticando a otros cuerpos por como lucen. Los primeros años de vida, los niños son como esponjas que absorben cada comentario, cada vivencia y después, repiten. Tengamos presente que es central poder ser pacientes en el proceso de aprendizaje, tanto con los niños como con nosotros mismos. Todos estamos deconstruyéndonos de a poco, no nos juzguemos si no nos sale de manera automática. ¡El hecho de estar haciendo las cosas distintas es un gran avance!

Este trabajo con los niños también va a fomentar una imagen corporal positiva en ellos:

Es fundamental hablar de su cuerpo y no de su apariencia física. Enseñarles a valorarlo por lo que les permite hacer, y no solo por como se ve. Cuando pueda apreciar a su cuerpo como un instrumento y no como un adorno, podrán disminuir la influencia de las opiniones ajenas sobre su imagen corporal. Es clave transmitirles que su valor como persona va más allá de su cuerpo. Su valor depende de quienes son, de lo que pueden hacer, las decisiones y las acciones que realizan. Enseñarles a tener una visión más crítica, a valorar sus capacidades como persona y a que no tengan miedo de ser quienes son.

Enfoquémonos en enseñar a cuidar la salud integral (física, mental y emocional) de nuestros niños. Súmate tú también y ayúdanos a cambiar el Bullying por Loving.

Si sientes que en algún momento necesitas apoyo profesional, no olvides que nuestros consultorios en línea ¡están 100% disponibles para ti! Y lo mejor es que son completamente gratis y nuestras profesionales te atenderán con todo el Loving del mundo.

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